Sine qua non

Sine qua non

Sine qua non

Conditio sine qua non o condición sine qua non es una locución latina originalmente utilizada como término legal para decir «condición sin la cual no». Se refiere a una acción, condición o ingrediente necesario y esencial —de carácter más bien obligatorio— para que algo sea posible y funcione correctamente.

Aún recuerdo con mucha emoción aquel día en que, jugando la categoría Falcons en los Bucaneros de Satélite, la lluvia nos sorprendió en pleno entrenamiento. Lejos de terminarse la práctica, los coaches decidieron que era momento de divertirse. Pienso que si tienes a treinta niños a tu cargo, puedes lograr mucha alegría con un campo mojado. El drill ideal para aquella pluvial situación: Recuperar fumbles en un gran charco. “Hagan dos filas. Una de este lado del charco y otra de este lado” dijo el Coach Truper. Dejó caer el balón en medio del charco y el que lo recuperara sería el vencedor.

Hace unos meses tuve la oportunidad de regresar a aquel campo. Las cosas han cambiado mucho. Ahora hay pasto sintético en donde había un charco . La zanja que rodeaba al campo ya no existe y, con ella, se fueron los sapos y renacuajos que nacían durante las lluvias de verano. Los niños usan cascos nuevos y no de gajos amarillos. Estuve ahí para apoyar al más pequeño de mis primos. Juega en Hornets. Le dicen el Apache. Tuvimos una sesión de “Heads Up Football”.

Mientras le daba la mini clínica, recordé que sólo hace 2 años había asistido a uno de sus juegos. El Apache no existía. Sólo un novato flaquito al que le quedaban grandes los shoulders que gustaba de jugar con los montículos de tierra que se formaban bajo la banca. No le interesaba el juego. En ocasiones (cinco en cada medio) alguien le gritaba para que entrara al campo. Él corría junto al coach, recibía instrucciones. Esperaba a que el QB diera la segunda voz. Bloqueaba al corner para que la carrera (del otro lado) fluyera.

Estando ahí, viéndolo practicar una nueva técnica de tackleo, poniendo atención, pensando en cada paso, en cada movimiento, me hizo pensar en que cuánto había crecido y madurado como jugador. Pero, también entendí que ya nunca se divertiría como aquel día cuando jugaba con el montículo de tierra. Me sentí feliz y triste al mismo tiempo. Intenté recordar la última vez que me había divertido jugando football americano y recordé aquel charco.

Pasó el tiempo. Hace una semana, se hizo viral el video de los niños que, durante un juego, prefirieron el “Whip an Nae Nae” sobre la 3-2 poder o la 43 regular.

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